El sistema cloacal del sector San Francisco, en Higüey, se encuentra colapsado y, en consecuencia, se solicita de manera urgente una solución definitiva para esta problemática que afecta gravemente tanto la salud de la población como el normal funcionamiento del centro educativo que alberga a más de 700 niños.
Raúl Rodríguez, presidente de la Unión Comunitaria San Francisco, hizo hincapié en la difícil situación que enfrenta el sector San Francisco en el municipio de Higüey, provincia La Altagracia. Esta zona, al ser la parte más baja de la ciudad, ha sufrido de manera desproporcionada las consecuencias del colapso del sistema cloacal, ya que el terreno plano propicia la acumulación de aguas residuales.
Según Rodríguez, existen problemas especialmente críticos en las calles Manuel Monte Agudo y Úrsula Moral, donde una cloaca ha estado vertiendo desechos fecales durante más de siete años. Sin embargo, recientemente, se reportó un colapso en una de las cloacas justo en frente del centro educativo San Francisco, lo que provocó la formación de un socavón.
Agregó que este socavón ha generado preocupación, y como medida de precaución, tanto el centro educativo como los padres de los estudiantes han decidido hacer guardia para garantizar la seguridad de los niños cuando entran y salen de la escuela.
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Rodríguez explicó que las tuberías instaladas son demasiado pequeñas para la creciente población del barrio, ya que el sector ha experimentado un significativo aumento en la cantidad de residentes.
Rodríguez describió la situación como un estado de emergencia y expresó su insatisfacción con la respuesta de las autoridades, calificándola como insuficiente.
Sostiene que se han improvisado soluciones, lo que ha generado problemas recurrentes.
El dirigente comunitario enfatizó que el sector San Francisco alberga a una considerable población de adultos mayores, quienes sufren constantemente las consecuencias de esta situación. Como ejemplo, mencionó el caso de una residente que se vio obligada a abandonar su hogar debido a que los desechos fecales fluían desde su baño hacia su vivienda.
Esta situación, según Rodríguez, plantea un grave riesgo para la salud de la comunidad y ha forzado a muchas personas a mudarse del sector debido al insostenible error y las aguas residuales.
Por último, explicó que las autoridades de competentes están trabajando en el lugar, pero sin una solución definitiva.
