Wall Street pierde la paciencia con Trump
Una de las primeras reacciones de Donald Trump a la debacle de Wall Street del lunes fue anunciar que se compraría un coche Tesla nuevo. Las acciones de la empresa automovilística estuvieron entre las más penalizadas de la jornada, y pierden ya más de la mitad de su valor desde los máximos de diciembre por la mala evolución de sus ventas, algo que el presidente de EE UU achaca a un boicot de la izquierda a Elon Musk. La caída en desgracia del fabricante de vehículos eléctricos es el indicador más extremo de lo que está sucediendo en los mercados estadounidenses: el GPS bursátil lleva tres semanas, desde sus récords del 19 de febrero, en modo recalculando. ¿Y si el mandato de Trump no es lo que esperábamos?, parecen empezar a preguntarse en el mundo del dinero.