Sammy confía en que documental le abra las puertas para Cooperstown
En la Navidad de 1998, Sammy Sosa llegó a Santo Domingo luego de una espectacular campaña de Grandes Ligas con los Cachorros de Chicago. Miles de fanáticos acudieron al Aeropuerto Las Américas a recibirle en un gran homenaje a su figura.
Un poco antes, en octubre, Sosa había finalizado una épica batalla jonronera que estremeció positivamente el béisbol y atrajo la atención de todos. Mark McGwire, de los Cardenales de San Luis, fue el ganador con 70 jonrones, pero Sammy fue el ídolo de todos con su gran carisma, su gran sonrisa y su facilidad para comunicar con el pueblo.
No solo fue recibido por miles de sus compatriotas. También disfrutó ese invierno de otras distinciones. Fue a Japón a recibir la adoración de todos, incluyendo un recibimiento especial que le hizo el emperador Akihito.
Bill Clinton, presidente de Estados Unidos, lo invitó a ser testigo durante el Discurso de la Unión.
Las autoridades de Nueva York lo invitaron a caminar por el Cañón de los Héroes, un desfile en su honor. El presidente dominicano Leonel Fernández lo honró en Palacio Nacional.
En medio de todo eso, Sammy y su fundación de caridad hicieron una colecta internacional para auxiliar a los damnificados del huracán Georges, que había azotado al país en septiembre cuando todavía la campaña de liga mayor no había finalizado.
Fue tal el impacto de la batalla jonronera, y tan amplio el cariño mostrado por el público que la calle que conecta al aeropuerto local con la Avenida Las Américas pasó a llamarse “Ruta 66”.
Precisamente fueron 66 los cuadrangulares disparados por Sosa, quedando detrás de McGwire. Al año siguiente, el enfrentamiento tendría una segunda jornada cuando McGwire produjo 65, para quedar primero y Sammy concluyó con 63.
Cooperstown
La cadena ESPN reproduce esos momentos espectaculares con este documental luego de haber realizado varias entrevistas a los protagonistas de entonces. El director es A.J. Schnack.
“Será algo impactante para todos nosotros y estoy muy contento junto a mi familia. Espero que este documental ayude en la proyección de mi persona ante la prensa norteamericana “.
Sosa se refería a las votaciones para Cooperstown, las cuales se les han negado hasta el momento. Luego del 2019 en los votos anunciados este pasado mes de enero, Sammy había estado presente en ocho ocasiones, siendo lo máximo 10.
Sus votos empezaron en 2013 luego de cinco años de su retiro recibiendo un escaso 12.5%, muy lejos del requerido 75%. En 2019, el total recibido fue de 13.9%, mejorando un poco, pero no lo suficiente. Ahora restan solo dos presentaciones en los votos, 2021 y 2022.
Aquellos que no son electos en dicho periodo serían tratados en el futuro en comités especiales del Salón de la Fama. Sammy se retiró luego del 2007 con 609 jonrones, promedio de bateo de .273, 1,667 hits y 2,408 empujadas. Ganó el MVP en 1998.
Tampoco ha podido cruzar McGwire, quien tuvo 583 jonrones, 1,414 empujadas y 1, 626 hits. Una vez McGwire confesó a un periodista de San Luis que estaba consumiendo un medicamento prohibido para aumentar su fuerza. Eso creó polémica y lo marcó para siempre.
En los votos, McGwire entró por vez primera en 2007 recibiendo el 23.5%, y en su última aparición en 2016 tuvo 12.3%. Jugó para Oakland y San Luis entre 1986-2001.
Sosa nunca fue sancionado por consumo de esteroides. Algunos lo vinculan con el Reporte Mitchell, que contiene 103 positivos, pero cuyos nombres no pueden revelarse por un acuerdo entre MLB y el Sindicato de Peloteros.
A Sammy lo persigue, sin embargo, un bate con corcho que le descubrieron en un partido del 2003 (6 de junio), aunque él explicó que había sido un error y que lo usaba solo en las prácticas. También finalizó con una mala relación con los Cachorros de Chicago. New York Times lo acusó una vez de estar en la lista que dio positivo.
Luego de 1998, Sosa tuvo tremendas campañas. Luego de los 63 de 1999 despachó 64 en el 2000, otros 50 en 2001 cuando fue líder de la Liga Nacional y 64 en 2002.
Es el único pelotero en producir 3 temporadas con más de 60 jonrones. (Barry Bonds se metió en medio de Sosa y McGwire pegando 73 en 2001).
“Todo eso debe tener algún valor, pero yo siempre he estado sorprendido de los pocos votos que recibo para Cooperstown,” dijo Sosa ayer a Listín Diario, desde su hogar en Miami.
También trató otros temas:
– Lamentó los problemas que ha significado la pandemia del coronavirus para el país y el mundo. “Yo he hecho mis oficios caseros también, cuido los perros, saco la basura”.
– Destacó como positivo el trabajo que ha venido realizando el gobierno del presidente Danilo Medina en el manejo de esta crisis, así como del candidato presidencial del PLD Gonzalo Castillo. ”Ellos lo están haciendo bien”, dijo Sammy.
– No ha tenido acercamiento constante con McGwire, pero espera verlo y saludarlo una vez se lance el documental. Dijo que vio un poco del documental “El Ultimo Baile”, de Michael Jordan.
Dice que sus hijos están grandes y se están graduando. “Sammy Junior es un experto en música electrónica, Kaleysy es fotógrafa, Kenya es diseñadora de moda y cantante, y Michael es un experto en dibujos animados”. El más pequeño, Rolando, tiene 16 años, y podría ser el único pelotero de la familia.”El está en eso, espero que le siga gustando el béisbol”.
SEPA MÁS
Documental será este domingo
ESPN
El documental “Long Gone Summer” será transmitido este domingo por ESPN a las 9 de la noche. Tiene 2 horas de duración.
– Retrata la batalla jonronera entre Sosa y McGwire en 1998 que estremeció al mundo deportivo en general.
Soporte
El contacto con Sammy fue facilitado por su hermano Domingo (Niño) y su amigo Domingo Dauhjare.