Antonio Diosdado, portavoz de la UME: “El fuego se nos echaba encima”
A 60 kilómetros de Valladolid, en una estación de servicio de la autovía A-6 de A Coruña, cuatro militares de la Unidad Militar de Emergencia (UME) apuran el bocadillo pasadas las 15.00 de este miércoles. El grupo forma parte de los retenes desplazados a los distintos puntos en una España que arde. Dependiente del Ministerio de Defensa, sus efectivos están desplazados en las zonas con el nivel 2 de emergencia, estado declarado por los gobiernos de las comunidades autónomas en coyunturas dramáticas como la oleada de fuegos de esta semana. Una vez activado el nivel 2, ya es posible requerir los servicios de la UME. Este miércoles, con 14 incendios activos por la mañana, había más de 1.000 militares en primera línea y otros 2.500 dando apoyo logístico o aguardando en los carteles para hacer el relevo. Como ejemplo, en Molezuelas de la Carballeda (Zamora), donde las llamas han arrasado más de 22.000 hectáreas, había 217 militares.