Las horas clave que evitaron una guerra comercial entre Estados Unidos y Colombia: “Trump está más loco que Maduro”
Se empezaron a intercambiar mensajes desde el domingo a las 3.00 am. A esa hora, el canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, y sus asesores organizaban la jornada de trabajo que tenían por delante. Comentaron que unas horas antes, Ann Hardman, la consejera política de la Embajada de Estados Unidos en Bogotá, había preguntado por el estado de los dos vuelos con colombianos deportados que llegarían en breve. A ninguno le llamó mucho la atención la llamada, era un procedimiento de rutina. Poco después, el presidente Gustavo Petro, que todavía no se había acostado, preguntó a su equipo lo que habían hecho México y Brasil en estos casos. Los funcionarios se pusieron a prepararle un informe.