Mujeres que se ejercitan tienen menor riesgo de padecer cáncer de mama
Numerosos estudios han demostrado que las mujeres que se mantienen activas físicamente tienen un menor riesgo de desarrollar cáncer de mama.
El ejercicio ayuda a prevenir el cáncer, controla la progresión de la enfermedad una vez que ha aparecido, influye de forma positiva en los tratamientos antitumorales y contribuye a mejorar el estado físico y el estado de ánimo de los pacientes.