Inflación y bajos salarios bajaron curso de remesas en 2022
Tres factores inciden en el envío de remesas: la inflación, los salarios y la depreciación de las monedas en plano local e internacional, de acuerdo a economistas consultados sobre la dismunición en las remesas recibidas por el país durante el 2022.
Según estadísticas del Banco Central, las remesas disminuyeron en 5.2 % al cierre de diciembre, lo que representa 546 millones de dólares menos que en 2021.
En 2022 las remesas alcanzaron 9,856.5 millones de dólares, cantidad inferior a los 10,402.5 millones de los doce meses de 2021.
Para el economista senior del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles, Miguel Collado Di Franco, además de la inflación, el comportamiento de los salarios en Estados Unidos, principal país emisor de remesas, es determinante en la dinámica del envío de dinero.
Collado aseguró que en 2022 se verificó una reducción en la tasa de crecimiento del salario por hora con relación al 2021. “Mientras los pagos a los trabajadores aumentaron menos que lo que lo hicieron en 2021, aumentaban los precios de los bienes y servicios”, dijo
Detalló que el precio de los artículos y servicios y la disminución del poder adquisitivo de los trabajadores dejó como consecuencia que las personas dispongan de menos recursos para poder enviar dinero a sus familiares y relacionados.
En Europa, donde los precios aumentaron por la inflación monetaria y por los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania, también se produjo un impacto similar que se refleja en los registros económicos del país, apuntó.
Comportamiento por trimestre
De su lado, el planteamiento del economista Henry Hebrard compara las cifras de 2022 con años previos a la pandemia del COVID-19 para destacar que, “a pesar del ligero descenso observado en 2022”, nos encontramos +39.1 % por encima del nivel normal del 2019”. Durante el último trimestre del 2022, hubo un ligero crecimiento del 0.2 % frente al trimestre de 2021, calculó.
Indicó que el fin de los programas federales y estatales de ayuda a los hogares en Estados Unidos para mitigar los impactos del COVID-19, que habían permitido a los dominicanos recibir fondos adicionales, alimentaron, en gran medida, el salto en las remesas durante los años de pandemia (2020 a 2022).
“Al desaparecer estos fondos, es normal pensar que las remesas pudieran volver a un nivel más bajo”, dijo.
Hebrard consideró que el descenso del 2022 se concentró durante los primeros nueve meses del año, afectado también por la devaluación que sufrió el euro frente al dólar.
Balance y tasa de empleo de EE.UU.
En su informe mensual, el Banco Central explicó que el desempeño económico de los Estados Unidos fue uno de los principales factores que incidió en el comportamiento de las remesas, ya que desde ese país provino el 84.4 % de los flujos en promedio.
En diciembre, se recibieron 671.2 millones de dólares desde ese país. Durante dicho mes, el desempleo de esa nación se ubicó en 3.5 %, su nivel más bajo desde inicio de la pandemia del COVID-19, habiendo finalizado el 2021 en torno al 3.9 %.
«El desempleo de la población hispana pasó de 4.9 % en 2021 a 4.1 % en diciembre de 2022″, indica el informe, publicado el 18 de enero de este 2023.
Contraposición al presentar perspectivas
Ambos economistas coinciden en que la inflación, el salario y la devaluación de las monedas impactaron el flujo de las remesas. Sin embargo, al hablar de proyecciones las opiniones difieren.
- Reducción en las remesas: Collado consideró que, con los estimados actuales de crecimiento e inflación, se esperaría una reducción en las remesas en 2023 por la economía de EE. UU. y la de países de la zona euro.
- Aumento en flujos de remesas: Hebrard augura que el nivel de remesas esperadas para 2023 pudiera situarse en un rango entre 9,500 y 10,500 millones de dólares, debido a la recuperación de algunos empleos.
Los economistas respondieron:
Miguel Collado: Si la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) se viera en la necesidad de incrementar las tasas a un nivel superior al esperado para 2023, el impacto en el envío de remesas al país sería mayor sobre el bajo crecimiento para 2023. En 2023 se espera una reducción en el ritmo de crecimiento de la economía de Estados Unidos, incluyendo trimestres en los cuales se pueda producir una contracción. Aumentos superiores en las tasas de interés incrementarían la caída del PIB, acarreando un impacto negativo mayor en el mercado laboral, lo cual impactaría a los trabajadores de ascendencia dominicana, o migrantes, y a su capacidad de poder remesar recursos al país.
Henry Hebrard:Habrá de esperar el primer trimestre del 2023 para tener una mejor idea de cual dirección tomará la tendencia de las remesas, pero de cualquier modo, seguirán siendo la primera fuente de generación de divisas y un estabilizador social de primera necesidad cuando la inflación impacte negativamente a los hogares más vulnerables de la República Dominicana.