Comercio chino en RD: entre precios baratos y subvaluación
La conversación de un grupo de mujeres esa tarde en el salón de belleza era dónde comprar barato. Una aseguraba que zapatos similares a los que encontraba en las plazas comerciales de Santo Domingo los veía en las tiendas administradas por chinos mucho más económicos. Otra les recomendó visitar un negocio en la concurrida avenida Duarte, para hacer sus compras más holgadas, gracias a los precios que ofertan sus dueños procedentes de China.
Lo que las damas no conocen es que, detrás de esos precios que les parecen más generosos, se han detectado casos de subvaluaciones en las declaraciones aduaneras y de evasión de impuestos. Además, sectores formales de la economía dominicana alegan que les representan una competencia desleal.
La situación, incluso, llega a intimidar a los mismos representantes de los sectores productivos y funcionarios. Hay quienes no se sienten a gusto hablando del tema y rehusaron conversar con Diario Libre o lo hicieron a modo de fuente, durante los dos meses que este periódico trabajó en este reportaje. Algunos argumentaron que se podrían afectar las relaciones diplomáticas con la República Popular China, iniciadas en 2018.
Las importaciones desde China por el régimen despacho a consumo representaron el 17 y 15 % del total importado por la República Dominicana en 2021 y 2022, respectivamente, equivalentes a más de 3,300 millones de dólares por año, conforme a los informes que publica la Dirección General de Aduanas (DGA).
Según los datos recabados por este periódico, el 26 % de las fiscalizaciones reliquidadas en 2022 -es decir, mercancías que la DGA objeta su valor declarado y las revalúa para que paguen el impuesto justo-, fue al sector de mercancía variadas vinculadas a importaciones hechas por chinos, que representaron unos 2,422.92 millones de pesos. Esto significa que, de cada cuatro pesos reliquidados, uno fue de ese sector.
Tras la insistencia de representantes del área comercial formal local y por iniciativa de la DGA, el 8 de noviembre de 2022 el Gobierno dominicano puso en funcionamiento una Mesa para el Control de la Competencia Desleal Fiscal. Aunque su cometido es general, los empresarios ya han llevado a las discusiones los negocios administrados por chinos.
En esta mesa participan el Ministerio de Hacienda, las direcciones generales de Impuestos Internos (DGII) y de Aduanas; el Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes; la Superintendencia de Bancos; la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD); la Asociación Dominicana de la Industria Textil (Aditex) y la Organización Nacional de Empresas Comerciales (ONEC).
“Se sabe que hay subvaluación en las importaciones de ellos (los chinos), evidenciado con informaciones que emite Aduanas”, dijo una fuente del sector comercial que conversó con Diario Libre. “Hemos podido comparar furgones de pantalones jeans que ellos traen, con furgones de pantalones jeans que trae un empresario formal, y la diferencia es radical”.
“Precios chinos” en megatiendas
La migración china a República Dominicana se registra desde hace más de 160 años. En 2017, cuando se hizo la Segunda Encuesta Nacional de Inmigrantes en la República Dominicana, se contó en el país una población de 2,595 personas nacidas en China.
Sin embargo, la Embajada de China en el país estima que en la actualidad la comunidad china tiene una población aproximada de 30,000 personas, y más de 25,000 de ellos se han naturalizado como dominicanos.
Esta comunidad históricamente se caracterizó por su incursión en los negocios de restaurantes, moteles, supermercados, papelería y joyerías.
Aunque no son nuevas las denuncias de evasión fiscal ni de competencia desleal contra determinados negocios de capital chino -ni esto ocurre solo en la República Dominicana-, hay un componente que ha proliferado en los últimos años: la instalación de grandes tiendas en la capital y provincias del interior en las que se venden artículos para la decoración del hogar, electrodomésticos, ropas y calzados, y una amplia variedad de productos falsificados.
Un perfume falsificado de la marca Hugo Boss se vende en una de estas tiendas a 520 pesos, cuando en su versión original puede costar 2,860 pesos. Otro de Carolina Herrera a 510 pesos, siendo el original a unos 4,814 pesos.
Cuidándose de no referirse a un sector en específico, el director general de Aduanas, Eduardo Sanz Lovatón, dice a Diario Libre que la institución ha incrementado la supervisión de los productos importados para enfrentar aspectos como la subvaluación, con la instalación de rayos X en puertos. Asegura que el 90 % de la carga que entra al país pasa por estos controles. “Se está fiscalizando más que nunca”, insiste.
Más de 90 % de la carga que entra y sale de RD es revisada por Aduanas
Sanz Lovatón agrega que la institución también ha reforzado los controles para enfrentar el ingreso de las falsificaciones. Se escuda en que esto no solo pasa en la República Dominicana.
“Hay mercancías que vienen de Asia y de otras partes del mundo –agrega– que tienen una capacidad manufacturera, tienen unas debilidades de propiedad intelectual, que producen a muy bajo costo. Entonces, los países en Occidente tienen que ver de qué manera implementan estos controles, para poder defender su industria nacional y también defender la competitividad de sus importadores que traen mercancías de otra parte del mundo y que pagan de manera formal”.
Asegura que la labor de la DGA es generar un ambiente de competencia leal. “Un ambiente de competencia justo, que, si tú pagas el 18 por ciento de Itbis (Impuesto sobre Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios), tu competidor lo pague; que si tú declaras tu mercancía al valor que es, tu competidor lo pague”, sostiene.
Se ufana en que los resultados de las fiscalizaciones realizadas, desde el 17 de agosto de 2020 a la fecha, son de 17,095.7 millones de pesos, alcanzando, solo en el año pasado, 9,318.93 millones de pesos, “siendo hasta el momento, el valor más alto determinado en un año” por Aduanas, superando en más de 28 % el valor de 2019.
“El problema, si bien no está resuelto, está siendo atendido, como pasa en todas las aduanas del mundo”, afirma. “Te garantizo a ti que no hay un solo almacén nuevo chino en estos tres años (periodo en los que él ha estado al frente de la DGA)”.
Diario Libre visitó una tienda con cinco meses abierta. Y en San Francisco de Macorís hay pequeños comerciantes que se sienten amenazados por la reciente instalación de dos grandes plazas de propietarios chinos.
“En los últimos meses están comenzando las inversiones e importaciones de artículos ferreteros”, observa Iván García, presidente de la Federación Dominicana de Comerciantes, un gremio que cuenta con 63,600 miembros. “Incluso hay una competencia muy fuerte a nivel de iluminación, de las lámparas”.
Una fuente compartió a Diario Libre facturas hechas a mano de productos de ferretería, sin detalles del comercio –solo el nombre– ni porcentaje respectivo del Itbis. Los sellos que la avalan están en chino.
Desde sectores productivos y entes consultados por Diario Libre se reporta que la DGII ha cerrado negocios de capital chino tras fiscalizarlos por evasión de impuestos y, al poco tiempo, los reabren en otro lugar con un nombre distinto.
“Inclusive, ya el Centro Histórico de Santiago, las tiendas tradicionales, los locales, ya están en manos de los comerciantes procedentes de China”, dice García.
Comenta que una tienda emblemática de Moca sus dueños prefirieron rentarla a chinos, “porque les pagan como un millón y medio de alquiler todos los meses”.
Así también han visto oportunidades de negocios propietarios de tiendas ubicadas en la tradicional avenida Duarte, del Distrito Nacional, donde ahora hay una importante presencia de tiendas administradas por chinos.
Está el caso de un antiguo gerente de una tienda de muebles y electrodomésticos. Hace dos años aceptó la oferta de rentar su local a 500,000 pesos mensuales, que le hicieron comerciantes chinos, para instalar un negocio de artículos variados. La aceptó, pues superaba su demanda rutinaria y podía recibir el pago en efectivo.
“En ese momento que nosotros alquilamos, la Duarte estaba bien deprimida”, cuenta el comerciante, que prefirió reservar su nombre. “La depresión comercial que había en la Duarte era muy preocupante, y cuando los chinos llegaron, realmente le dieron vida al sector, lo que hizo que los locales que estaban bastante desvalorizados tomaran valor”.
En una de las tiendas visitadas por Diario Libre se verificó también una alta empleomanía haitiana. Entre estos migrantes había quienes aún no dominaban el español.
La Embajada de China asegura que pide negociar de forma leal
En la pasada gestión de la DGII se hicieron operativos contra la evasión fiscal en el Barrio Chino del Distrito Nacional, pero empresarios consultados por Diario Libre entienden que no fue suficiente. Además, se quejan de que estos operativos no hayan continuado de la misma forma en la actual gestión.
Diario Libre insistió en el Ministerio de Hacienda para una entrevista para este reportaje, pero no fue posible.
El vicepresidente ejecutivo de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), Mario Pujols, recuerda que por el establecimiento de relaciones diplomáticas entre República Dominicana y la República Popular China se abrieron los canales formales para que se incrementara el flujo del comercio, turismo e inversión entre ambos países.
Esto también lo destaca la Embajada china. “A pesar de la pandemia, la importación y la exportación bilaterales crecen de manera estable, y hay unas 20 empresas chinas que invierten o establecen oficinas en República Dominicana, mostrando un indicio claro de beneficio mutuo”, dice su portavoz Xu Tiefei en una declaración escrita enviada a Diario Libre.
“Estamos convencidos de que, a medida que pase la pandemia, el intercambio económico comercial bilateral será más activo, trayendo más beneficios mutuos a ambos pueblos”, asegura.
No obstante, Pujols indica que “la AIRD valora positivamente la inversión extranjera directa, sin hacer distinción de su origen, siempre que cumpla con las normativas vigentes en el país y que respete la libre y sana competencia”.
estima la Embajada de China que componen la comunidad china en República Dominicana.
La Embajada asegura que “China siempre aboga por la competencia leal”. Agrega que dicha embajada “pide a los comerciantes chinos que desarrollen sus negocios conforme a las leyes y reglamentos” de República Dominicana, “y respeten las tradiciones y costumbres de la gente local”.
“Al mismo tiempo -continúa-, la Embajada protege los derechos e intereses legales y justos de los chinos residentes en RD. Siempre estamos dispuestos a trabajar junto con las instituciones competentes de RD para salvaguardar la competencia leal, justa y no discriminatoria en el mercado dominicano, orientando a los comerciantes chinos en RD para que hagan mejor adaptación al mercado y mayor contribución al desarrollo económico-social del país residente”.
A pesar de la voluntad que argumenta la representación diplomática, una fuente ligada al sector comercial dominicano considera que las variables en que se desarrolla la competencia con los negocios chinos “es una problemática que se le ha dado mucho tiempo y mucho espacio a que siga aumentando”.
“Si esto continúa como va –dice–, muy posiblemente en cinco años, los comercios que hoy vemos en nuestras calles que son dominicanos, muchos van a pasar a la informalidad o no van a existir, porque la competencia desleal es muy fuerte para poderla sostener”.