Intensidad de ataques en Sudán han disminuido
El Ejército de Sudán aseguró hoy que la intensidad de los combates con el poderoso grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) «ha disminuido» en las principales zonas calientes de Jartum, tras seis días de enfrentamientos consecutivos que han dejado más de 330 civiles muertos en todo el país.
«La situación operativa se ha mantenido estable hasta el momento. Ha disminuido la intensidad de los ataques de las milicias rebeldes en las inmediaciones de la Comandancia General», en el centro de Jartum, indicaron las Fuerzas Armadas en un comunicado.
Asimismo, indicaron que aviones de combate del Ejército atacaron convoyes de las FAR que se movilizaban hacia Jartum desde las carreteras de Tahadi y Bara Road.
Los bombardeos, de acuerdo con los militares, destruyó «la totalidad» de los dos convoyes, además de «un centenar de vehículos» cargados con armamento y suministros.
Los combates continuaron este jueves entre el Ejército y las FAR en Jartum y otras regiones de Sudán pese a la tregua de 24 horas anunciada por las partes, en medio de crecientes alertas acerca de la situación humanitaria y sanitaria de la población.
Ambas partes se han acusado mutuamente de violar el armisticio, que en ningún momento fue respetado desde que entró en vigor la tarde del miércoles, de la misma forma que no se adhirieron a una tregua propuesta por Estados Unidos el día anterior.
Los combates se desataron el pasado sábado entre el Ejército y las FAR en todo el país después del fracaso de las negociaciones para incorporar ese poderoso grupo paramilitar en las Fuerzas Armadas, en el marco del proceso de transición democrática que se desarrolla en el país desde el derrocamiento del dictador Omar al Bashir, en 2019.
Los enfrentamientos han complicado aún más la situación humanitaria y sanitaria en el país, donde el Sindicato de Médicos de Sudán aseguró hoy que el 70 % de los hospitales en Jartum y en los estados aledaños al conflicto se encuentran fuera de servicio.
La oficina de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el Mediterráneo Oriental, que cubre Sudán, informó hoy de que casi 330 personas han muerto y 3,200 han resultado heridas como consecuencia de los combates.