Comienza reactivación del canal La Vigía en río Masacre

El Gobierno comenzó este miércoles los trabajos para la reactivación de la toma de agua en el canal La Vigía sobre el río Dajabón o Masacre. Hace días que el presidente Luis Abinader anunció esta obra como una medida a corto plazo para garantizar el acceso al líquido a los productores agrícolas y habitantes de la provincia Dajabón.

La información fue confirmada por el portavoz de la Presidencia, Homero Figueroa, en su cuenta en la red social X, antes llamada Twitter.

“Ya se dio inicio a los trabajos de reactivación de la toma de agua en La Vigía, en el río Dajabón. Esto permitirá garantizar agua a cientos de productores agropecuarios”, expresó.

El pasado lunes 11 de agosto, el presidente Luis Abinader anunció la reactivación del canal de La Vigía para contrarrestar las consecuencias de la construcción de un canal sobre el río Masacre por parte de civiles haitianos, obra considerada por el Estado dominicano como violatoria del Tratado de Paz de 1929 que prohíbe la desviación de los ríos transfronterizos.

Abinader dijo que el canal La Vígía cuenta con por lo menos 10 kilómetros y que por ese caudal se puede distribuir metro cúbico de agua por segundo

“Es una cantidad suficiente para poder distribuir el agua en ese punto que está al sur del territorio haitiano y el agua entonces vuelve al río Masacre más hacia el norte del pueblo de Dajabón”, explicó en la ocasión.

La toma de La Vigía no funcionaba desde 2007 por conflictos con ciudadanos haitianos. La reactivación de este canal le tomaría al gobierno dos meses y se trata de una medida para solucionar un problema a corto plazo.

La decisión definitiva es la presa de Don Miguel, dijo Abinader. El mandatario informó que en dos meses comenzará la licitación de esta obra por unos 2,700 millones de pesos y su construcción se tomará 30 meses, aproximadamente.

Conflicto por el río Masacre

Desde principio de septiembre fue dado a conocer que civiles haitianos reanudaron la construcción de un canal sobre el río Masacre, una obra a la que el Gobierno dominicano se ha opuesto por temor a la desviación de su corriente.

La empresa cubana DINVAI diseñó el canal para los haitianos, y de acuerdo a Luis Abinader, este contempla la construcción de un dique o muro de contención para captar el agua del río, un aspecto que prohíbe el tratado de 1929 firmado por ambos países.

La obra se paralizó en el 2021 tras el asesinato de Jovenel Moïse, pero hace unas semanas un grupo de campesinos haitianos retomó la construcción, respaldados por grupos empresariales, políticos y hasta de bandas armadas.

Abinader solicitó la detención de esta obra y el diálogo, pero ante la negatividad sostenida, dispuso medidas técnicas para garantizar el abastecimiento de agua proveniente del caudal como la reactivación de La Vigía y la construcción de la presa de Don Miguel.

Además, cerró toda la frontera con Haití, suspendió los visados a haitianos y prohibió la entrada a la nación de parte de los «financiadores» del canal.

La frontera cumplirá este viernes una semana cerrada, y se mantendrá así, dijo Abinader, hasta que los haitianos paralicen la obra. Cuando esto pase el Gobierno dominicano estará en la disposición de sentarse en la mesa del diálogo.

El mandatario llevó el tema este miércoles a la Asamblea General de la ONU, en Nueva York. 

«No tenemos, ni deseamos ni buscamos una confrontación con el pueblo haitiano, pero sí estamos enfrentando a los actores incontrolables que mantienen la inseguridad en Haití por sus intereses particulares, y que ahora conspiran también contra la estabilidad de su gobierno y la seguridad de los recursos hídricos», enfatizó Abinader en un discurso ante la ONU.