Abinader valora designación de un primer ministro de Haití
El presidente Luis Abinader valoró este martes la escogencia de un primer ministro en Haití, lo que consideró como un “avance”, en medio de la crisis que atraviesa la vecina nación.
- “Yo pienso que es un avance que se vaya seleccionando y haya alguien con quien poder interactuar”, expresó el mandatario al responder una pregunta en LA Semanal con la prensa en el Palacio Nacional.
Este martes en la mañana, el Consejo Presidencial de Transición en Haití escogió a Edgard Leblanc Fils como presidente de ese órgano, y designó a Fritz Bélizaire como primer ministro.
Abinader dijo que no conoce a Belizaire, pero que se alegra de cualquier mejoría que haya en Haití.
El Consejo Presidencial de Haití, que asumió el liderazgo de ese país el pasado jueves 25 tras la dimisión de Ariel Henry, escogió con la mayoría de cuatro votos a Fritz Bélizaire, quien asumirá el cargo de primer ministro de manera interina hasta la celebración de elecciones en febrero de 2026.
Bélizaire fungió como ministro de Deportes en 2006.
Posición de RD ante violencia en Haití
El nombramiento de un Consejo Presidencial y la designación de un primer ministro interino son los primeros pasos de una carta de ruta definida con ayuda de la comunidad internacional para ayudar a Haití a sobrellevar su crisis, agravada por la violencia de las pandillas.
Desde que asumió la presidencia en el 2020, Abinader ha abogado por ayuda internacional para Haití. Llamado que se ha reiterado en repetidas ocasiones por el canciller Roberto Álvarez en diversos escenarios internacionales.
En la ocasión más reciente, Álvarez pidió ante los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas la semana pasada más sanciones contra los facilitadores de la violencia en Haití y aplicar con más rigor el embargo de armas que llegan al vecino país, al tiempo que insistió en que República Dominicana no puede adoptar medidas que atenten contra la estabilidad y la seguridad del país ni superar las posibilidades materiales para apoyar a la nación caribeña.
Además, República Dominicana ha mantenido su posición de continuar con las deportaciones de los migrantes haitianos, así como su renuencia a aceptar un campo de refugiados en el territorio nacional para la población haitiana.