Familiares de desaparecidos visitan zona del derrumbe

Familiares de los desaparecidos visitaron el domingo el lugar donde se desplomó un edificio en condominio de Florida en el que los rescatistas continúan retirando escombros, aferrándose a la esperanza de que aún haya personas vivas.

El número de fallecidos aumentó en apenas cuatro personas, a un total de nueve confirmados. La policía identificó a esas cuatro el domingo en la noche: Christina Beatriz Elvira, de 74 años; Luis Bermudez, de 26 años; Leon Oliwkowicz, de 80 años; y Anna Ortiz, de 46 años.

Después de casi cuatro días completos de labores de búsqueda y rescate, más de 150 personas continúan desaparecidas en Surfside. Nadie ha sido localizado con vida entre los escombros desde el jueves, horas después del derrumbe.

Algunos familiares albergaban esperanzas de que en su visita podrían gritarles mensajes a sus seres queridos que pudieran estar debajo de los escombros.

Varios grupos de familiares llegaron en autobuses a un sitio desde donde podían observar los escombros y las labores de rescate. Conforme los parientes volvían a un hotel cercano, varios se detuvieron para abrazarse al descender de los vehículos. Otros simplemente caminaron lentamente de regreso a la entrada del hotel.

“Sólo esperamos respuestas. Es lo que queremos”, dijo Dianne Ohayon, cuyos padres Myriam y Arnie Notkin estaban en el edificio. “Es difícil atravesar estos días tan largos, y aún no tenemos ninguna respuesta”.

El ministro de Asuntos de la Diáspora de Israel, Nachman Shai, quien acudió a la visita con algunos familiares, encabezó una delegación humanitaria en Surfside que incluía a varios expertos israelíes en operaciones de búsqueda y rescate. Dijo que los expertos le comentaron de casos en que se ha localizado a sobrevivientes después de más de 100 horas.

“Así que no pierdan la esperanza, es lo que diría. Pero todos deben estar al tanto de que, conforme pase más tiempo, disminuyen las posibilidades de encontrar a alguien con vida”, reconoció.

“Si se ve la escena, uno sabe que es casi imposible que haya alguien con vida”, añadió Shai. “Pero nunca se sabe. A veces suceden milagros. Los judíos creemos en los milagros”.

Los rescatistas intentaron asegurarles a los familiares que están haciendo todo lo posible para encontrar a sus seres queridos, pero también indicaron que necesitan trabajar con cuidado para tener la mejor oportunidad de hallar a sobrevivientes.

Algunos de los familiares expresaron su frustración con la velocidad de las labores de rescate.

“Mi hija tiene 26 años y está en perfecto estado de salud. Podría sobrevivir”, dijo una madre a los rescatistas durante una reunión con familiares el fin de semana. Un video del encuentro fue publicado en Instagram por la usuaria Abigail Pereira.

“No es suficiente”, continuó la madre, que era uno de los familiares que exigieron a las autoridades traer expertos de otros países para colaborar con las labores. “Imaginen que son sus hijos los que están ahí”.

Decenas de trabajadores de rescate seguían sobre la enorme pila de escombros en busca de sobrevivientes, pero hasta el momento únicamente han encontrado cuerpos y restos humanos.

En una reunión con familiares el sabado en la tarde, las personas se quejaron y lloraron luego de que el subjefe del Departamento de Bomberos de Miami-Dade, Raide Jadallah, les explicó los motivos por los que no podía responder a las reiteradas preguntas sobre cuántas víctimas habían localizado.

“No necesariamente estamos hallando víctimas. Estamos encontrando restos humanos”, dijo Jadallah, según el video publicado en Instagram.

Dijo que el derrumbe del edificio de 12 pisos dejó una pila de escombros de varios metros de altura. Dichas condiciones han frustrado a las cuadrillas que buscan a sobrevivientes.

Cada vez que los socorristas encuentran restos, limpian la zona y los retiran. Trabajan con un rabino para garantizar que cualquier ritual religioso se lleve a cabo de manera apropiada, puntualizó Jadallah.

Si las cuadrillas encuentran “artefactos” como documentos, fotografías o dinero, los entregan a la policía, indicaron las autoridades.

Alan Cominsky, jefe del Departamento de Bomberos de Miami-Dade, dijo que mantienen la esperanza de encontrar a personas con vida, pero deben ser lentos y metódicos.

“Los escombros están por todos lados, y están muy compactados, sumamente compactados”, comentó.

Los restos deben ser estabilizados y apuntalados conforme avanzan.

“Si hay un espacio vacío, queremos asegurarnos de tener todas las posibilidades de encontrar a un sobreviviente. Es por eso que no podemos entrar y mover las cosas de forma errática, porque eso tendrá el peor resultado posible”, añadió.