Mujeres del noroeste encuentran oportunidad en fibras de banano
La línea noroeste se caracteriza por resaltar en sus propuestas turísticas su cultura y los productos que mejor cosechan, como es el caso del banano, el cual se ha convertido desde hace muchos años en un producto importante para la economía local. En este sentido, también resaltan los usos alternos que habitantes de la región le han dado, específicamente de Santa Cruz de Mao, Valverde; donde aprovechan no solo la fruta, sino también las fibras de las matas.
La Asociación de Fabricantes de Artesanía de Valverde (Asfaval) agrupa a mujeres que hacen una gran variedad de productos con terminaciones de alta calidad, todas a partir de las fibras que se desprenden de la “barriga” de la mata de banano o guineo, generando diferentes texturas y colores.
Ana Rodríguez, presidenta de Asfaval, explicó que se capacitaron desde el 2015 y brindan una experiencia de turismo cultural comunitario. Es a partir del 2017 que se organizan como asociación y se componen de unas 13 mujeres en la mano de obra artesanal.
Para esas damas realizar estos productos representa, además, un relajamiento que les da diversión al tiempo que generan ingresos económicos.
Oportunidad de trabajo
Antes de que se iniciara el proyecto, en Valverde se realizó un estudio que arrojó que las mujeres estaban en desventaja frente a los hombres en cuanto a la vida productiva, así que se vio como una manera de que pudieran recibir ingresos y, más adelante, pudieran desarrollarse, todo esto con la alianza del Proyecto Turismo Comunitario y el apoyo de instituciones público-privadas.
Es un negocio abierto al público en general, ubicado en la Casa de la Cultura de Mao, a la espera de contar con un espacio más amplio para el desarrollo de su comercio.
En la parte económica, Rodríguez explica que aún no hay un gran cambio, puesto que no todos conocen de lo que hacen allí.