La mascarilla, un accesorio de moda y salud que llega al cine
Desde que se desató la pandemia del COVID-19, el uso de mascarillas se ha convertido en un elemento cotidiano y popular a nivel mundial. Su uso obligatorio pasó de ser exclusivo del personal médico a formar parte del día a día de todos y de inmediato un accesorio de moda que no puede faltar.
En la industria del entretenimiento, no fue incluida de inmediato, quizá porque se pensó que sería algo rápido, pero no ha sido así. A casi dos años bajo los efectos de la crisis sanitaria la industria del cine ha retomado su «normalidad» y con ella el uso de las mascarillas como aliada, siendo un elemento indispensable para personajes y punto focal en algunas escenas.
«Si la trama lo requiere, las mascarillas debe ser un punto clave del vestuario de la película», asegura Angélica Álvarez, makeup artist & fashion stylist, con más de siete años de experiencia en el mundo audiovisual, que le han permitido trabajar en la industria musical en proyectos de reconocidos artistas como lo son: Daddy Yankee, Wisin y Yandel, J Balvin, Marc Anthony, Manuel Turizo y Ozuna.
Álvarez, quien fue la jefa de vestuario y maquillaje del largometraje «Guayabo», que se estrena este 30 de septiembre en todos los cines de República Dominicana que se estrena este 30 de septiembre en todos los cines de República Dominicana, resalta que hay que estudiar cada personaje para determinar su vestuario e igual pasa con los tapabocas: «Por ejemplo, en el caso de «Guayabo», las mascarillas se decoraron de acuerdo al personaje que las usaría. Aunque no siempre será necesario su uso, en este caso era imprescindible porque la trama se desarrolla dentro de ese contexto».
La experta refiere que las mascarillas en cuestión se hicieron de una manera muy particular, con un concepto artístico muy claro, puesto que se escogieron las telas según las piezas de cada personaje, en base a un trabajo manual de recamado y decoración, lo que las vuelve un punto clave del vestuario.
Sin embargo, la fashion stylist radicada en Miami, aclara que, en las escenas de la película, el uso la mascarill tiene un significado aún más profundo pues, lejos de su uso obligatorio como parte de las medidas de bioseguridad, estas forman parte decorativa del código de vestimenta para entrar a la fiesta: «Al final, los personajes las desechan. Dentro del universo de la película, es como una forma de burlarse de las medidas de seguridad que deben llevarse a cabo por el momento en que está viviendo el mundo».