El Inabie, bajo la sombra de los escándalos en los últimos 15 años
En casi 25 años de fundación, el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil, conocido por su acrónimo Inabie, ha tenido que lidiar en los últimos 15 con escándalos que van desde intoxicaciones de estudiantes y retrasos de pagos o suspensión de suplidores, hasta millonarias y criticadas licitaciones.
Los concursos son necesarios para cumplir con su objetivo de promover las herramientas que aseguren el bienestar de los estudiantes de nivel primario y secundario del sistema escolar público del país; pero estas convocatorias son las que mayor cantidad de problemáticas han provocado.
Entre las más recientes está que a finales de septiembre pasado, varios suplidores denunciaron irregularidades en las licitaciones de proveedores por un costo de un costo de más de doce mil millones de pesos, lo que retrasó por semanas la entrega de almuerzos y desayunos escolares de más de un millón de estudiantes.
Pese a que las irregularidades fueron negadas por el ministro Roberto Fulcar, diez días después el director de Contrataciones Públicas (DGCP), Carlos Pimentel, informó que había recibido 27 recursos jerárquicos y 12 solicitudes de medidas cautelares contra la licitación pública nacional número INABIE-CCC-LPN-2021-0009, para el suministro de raciones alimenticias del año escolar 2021-2022; así como también contra la licitación INABIE-CCC-LPN-2021-0007, para la “adquisición de alimentos crudos y alimentos procesados y su distribución a los centros educativos públicos”.
Todavía para el 22 de octubre, cada uno de esos recursos se encontraban “en proceso de investigación”, situación que se pudiera extender, según Pimentel, por la multiplicidad de actores.
El pasado 1 de noviembre fue entonces cuando el Ministerio de Educación inició la investigación del proceso de licitación donde participaron 2,565 oferentes de los cuales fueron adjudicados 1,821 para suplir almuerzo escolar de la tanda extendida.
Ayer, el ministro Fulcar informó que el proceso arrojó la identificación de fallas importantes en la institución “que requieren de cambios significativos en la gerencia y reorganización de procesos tanto internos como relacionados con los suplidores”.
Renuncias
De igual forma, el ministro dijo que comenzaría este lunes con los cambios necesarios para hacer cada vez más transparentes todos los procesos enfocados al bienestar estudiantil, necesidad que se veía en esta institución desde hace más de un lustro.
Hace seis años, cinco de los siete miembros de la Comisión de Veeduría renunciaron a su función como “veedores” de ese organismo descentralizado adscrito al Ministerio de Educación, por considerar que no eran tomados en serio y sus más importantes solicitudes de información no eran respondidas a tiempo.
Los integrantes que renunciaron de la comisión eran la periodista Ana Mitila Lora, los empresarios Ramón P. Báez y Flavio Rodríguez Méndez, y el representante de la Iglesia Católica, Frank de la Cruz, y en nombre de la Evangélica, Johnnie Martínez.
Entre las razones que motivaron su salida están que llevaban más de un mes esperando explicaciones sobre algunas intoxicaciones en escuelas de provincias y las justificaciones de por qué se contratan suplidores por tres años consecutivos que no reúnen las más mínimas condiciones para serlo, pese a la existencia de requisitos para aspirantes.
Mochilas de Lucía Medina
La entrega de mochilas escolares con el logo de una fundación de la entonces diputada Lucía Medina generó una ola de críticas e indignación en parte de la sociedad en 2018.
Un audiovisual se difundió en la web y redes sociales en el que observaban a niños develar el logo del ministerio de Educación bajo un logo de una fundación de la exlegisladora y hermana del expresidente Danilo Medina.
Aunque no directamente, el Inabie se vio involucrado en este escándalo al ser la institución del Estado encargada de distribuir las mochilas del Minerd. No obstante, la empresa suplidora de las mochilas, Stone Blue, aseguró que el hecho fue resultado de un «error de producción» a causa de “la prisa”, donde al menos fueron afectadas 400 mochilas, de 3,000 que pidió Medina.
El Minerd anunció el inicio de una investigación en septiembre de 2018, pero no presentó los resultados de la misma ni confirmó la veracidad de lo expuesto por la empresa, que era suplidora del Inabie.
Deudas
Una constante ha sido el retraso de pagos a los suplidores. A finales de enero de 2018, los suplidores amenazaron con detener el almuerzo escolar, pero el ministro Andrés Navarro le aprobó al Inabie la apertura de una cuenta de pagos retrasados. La razón de aquella tardanza fue que alrededor de 45 mil docentes recibirían incentivos por evaluación de desempeño junto a su salario.
En febrero de 2019, la institución adeudaba unos 700 millones de pesos a los industriales de la harina y cerca de cinco mil con todos los proveedores de ese servicio.
En mayo de ese mismo año, el entonces presidente de la Federación Nacional de Comerciantes y Empresarios de República Dominicana (Fenacerd), Manuel Ortiz Tejada, denunció que el Inabie adeudaba más de RD$5,000 millones a los suplidores del desayuno escolar. Lo que fue rechazado por la institución.
Asimismo, los registros periodísticos de octubre de 2020 recogen que las asociaciones de pequeñas y medianas empresas textiles se encontraban preocupados por la falta de pago de una contratación de RD$500 millones realizada en 2019 por el Inabie para la producción de los uniformes escolares y mochilas.
Intoxicaciones
A estas situaciones se le agrega el número de intoxicaciones reportadas escolar en 2010. La causa fue atribuida a la leche que se entregaba entonces y, en los últimos casos, del jugo suministrado por el Programa de Alimentación Escolar (PAE), responsabilidad del Inabie.
Años después, con la implementación de la tanda extendida también se presentaron denuncias acerca de los almuerzos. De los casos más recientes, los archivos periodísticos de Listín Diario reseñan en 2019 la investigación de una denuncia realizada por un grupo de estudiantes del Liceo Darío Peña Suriel, del municipio de Constanza, sobre el mal estado de alimentos servidos en ese plantel.
Pese a que, según el entonces director del Inabie, René Jáquez Gil, el director del liceo no había informado a la entidad ninguna anomalía en la entrega del almuerzo escolar, las autoridades iniciaron una investigación del hecho para establecer el protocolo de actuación.
Sepa más
El artículo 177 de la Ley General de Educación 66-97, establece la creación del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie), como el organismo que tiene como finalidad promover la participación estudiantil en las diversas actividades curriculares, cocurriculares y extracurriculares.
Servicios de transporte, nutrición escolar, servicios de salud, uniformes y útiles, creación y apoyo a clubes científicos, tecnológicos y de artes, becas e intercambios de trabajo social, de turismo estudiantil, trabajo remunerado en vacaciones y de gobierno estudiantil, son algunas de las responsabilidades de esta institución descentralizada del Ministerio de Educación (Minerd).