Un jurado declara no culpable al New York Times de difamar a Sarah Palin
Un jurado concluyó este martes que no hay pruebas suficientes para determinar que el New York Times difamara en uno de sus artículos en 2017 a la política Sarah Palin, la que fuera aspirante a la vicepresidenta de EE.UU., que había acusado al diario de injurias.
El jurado, formado por nueve personas, llegó a la conclusión de que el diario no actuó de mala fe contra Palin, un requisito considerado clave para establecer si hubo delito, después de haber estado deliberando desde el viernes por la tarde.
Su decisión se produce un día después de que el magistrado del caso, Jed Rakoff, anunciara que iba a desestimar el caso, algo que el jurado desconocía.
Se espera que Palin presente una apelación, como han indicado previamente sus abogados.
En Estados Unidos, la prensa cuenta con importantes protecciones que hacen muy difícil que este tipo de demandas por difamación prosperen, ya que la persona que denuncia debe presentar pruebas de que el medio en cuestión actuó con mala intención.
La demanda de Palin data de 2017, cuando el Times publicó un editorial en el que aludió a un tiroteo sucedido en 2011 en el que murieron seis personas y donde resultó gravemente herida la entonces congresista demócrata Gabby Giffords.
En el editorial, el periódico vinculaba el suceso con un mapa distribuido por la campaña de acción política de la republicana y que señalaba varios distritos electorales, incluido el de Giffords, con un punto de mira.
El diario reconoció su error y publicó una corrección dos días después, pero Palin insiste en que la publicación actuó con mala fe para tratar de perjudicarla, y ha tratado de buscar una compensación económica.
En el proceso, la representación de Palin defendió la necesidad de que los medios rindan cuentas y acusó al Times de haber promovido una «narrativa» en contra de la republicana, sin hacer caso a los hechos reales.
Los abogados del periódico, mientras, argumentaron que el editor encargado de la pieza no tenía ninguna intención de establecer un vínculo directo entre el mapa de la campaña de Palin y el tiroteo y que no se dio cuenta de cómo algunos lectores podían interpretar la referencia.
El caso había despertado mucha expectación en Estados Unidos, tanto por la fama de la demandante como por sus posibles consecuencias para los medios, pues numerosos analistas lo veían como emblema de un posible giro en la Justicia estadounidense (en este caso contrario a la prensa) en este tipo de procesos.
En los últimos años, jueces conservadores del Tribunal Supremo han defendido la necesidad de revisar la jurisprudencia en este ámbito, unas posturas que ganaron fuerza durante la Presidencia del republicano Donald Trump (2017-2021), que en numerosas ocasiones llamó a cambiar las normas sobre difamación para facilitar las demandas contra los medios.