Elizabeth y Joel siguen presentes en Cuesta Linda

Han pasado diez días desde el sepelio de la pareja de esposos evangélicos, y el día siguiente de la decisión dictada por el Tribunal de Villa Altagracia a los miembros de la Policía que arremetieron contra los jóvenes, la comunidad donde ambos residían (en Santo Domingo Norte) se encuentra en gran silencio y mantiene el luto.

“Mira cómo está el barrio (…) triste, estamos tristes porque fueron dos personas de valores que se perdieron. Nosotros estamos preparados para todo. Nuestro país no puede seguir así, nosotros queremos cambios”, expresó Edirsia Paredes, vecina cercana a la familia Muñoz.

Entre tanto silencio, los familiares de Elizabeth Muñoz y Joel Díaz, que se dirigían a buscar unas cosas a la casa donde residían los cristianos, manifestaron su conformidad con la disposición de las autoridades judiciales que dictaron un año de prisión preventiva contra seis policías.

 “Hasta ahora estamos bien, porque fue lo que esperamos. Ahora los abogado van a trabajar en el curso de la investigación para ver lo que hay detrás de esto, nosotros ya sabemos que lo que estaban ahí fueron los que cometieron el hecho, pero sabemos también que habían más personas”, expresó Marino Muñoz, el padre de Elisa Muñoz, a reporteros de este medio la mañana del sábado.

De igual forma, los amigos de la pareja en la comunidad de Cuesta Linda han aceptado con mucho regocijo esta decisión con la creencia de que todo será esclarecido conforme marcha la investigación.

“Aceptamos de la mejor manera el año de prisión, nosotros lo que queremos es que esto se aclare lo más pronto posible, para nosotros salir de esto y tener paz. El que nada debe, que no pague, pero el que debe tiene que pagar”, fue lo que manifestó Edirsia Paredes, una vecina cercana a la pareja, que se encontraba ayer en la protesta en Villa Altagracia.

El viernes el Tribunal de Atención Permanente de Villa Altagracia, provincia San Cristóbal, dictó una año de prisión preventiva a los agentes policiales Victorino Reyes Navarro (segundo teniente), Domingo Perdomo Reyes (sargento), así como de los cabos Norquis Rodríguez Jiménez y Ángel de Los Santos y los rasos Antony Castro Pérez y Juan Samuel Ogando Solís.

Además, declaró el caso complejo. 

Agarrados de Dios y con fe en la justicia dominicana

El padre de Elisa Muñoz indica que puede darse el caso de que en el transcurso de la investigación intenten entorpecer y distorsionar los hechos, pero afirmó que ha depositado su confianza en la justicia dominicana.

“Espero en Dios que la justicia dominicana entienda que esto no es una tragedia cualquiera de la que nosotros hemos escuchado, a quien ellos mataron fue a una sierva del Señor, haciéndole un trabajo al que le da el respiro, pero van a pagar. La justicia les va a pesar y les está pesando a muchos de ellos desde ahora”, manifestó.  

“Queremos que aparezca el coronel que fue el jefe que dio la orden. Nosotros lo queremos, estamos pidiéndolo”, reclamaron los vecinos.