Errores sexuales comunes en las personas jóvenes

Muchas personas jóvenes, rondando los 30 años, aún cometen muchos errores dentro de su vida sexual, los cual los hace llegar pronto a la frustración, la falta de deseo sexual y hasta el hartazgo. Aquí listamos algunos de los más habituales.

Hacer del sexo una rutina. Acostumbrados a una vida necesitada de rutinas, cómo puede ser el estudio, el trabajo, el ejercicio o la alimentación, algunas personas también encasillan al sexo en una rutina más, volviendo al sexo algo perezoso, carente de sorpresa, espontaneidad y placer. Lo ideal es ser consciente del tiempo, aprovecharlo en beneficio propio y de la pareja y disfrutarlo.

Algunas personas creen que la falta de deseo es algo irreparable y terminan colapsando. Incluso en pareja, en sociedades dedicadas íntegramente a la producción, el deseo sexual puede mermar. Esto no representa un problema en sí mismo, puesto que es algo que puede ir y venir sin que genere conflictos..

Abandonas tu vida sexual al momento de tener hijos. Este también suele ser un problema recurrente, puesto que los padres terminan extenuados tras un día habitual que ahora se ha transformado con la llegada del bebé. Busquen el espacio, construyan el lugar y los reencuentros.

¡Siguen sin prestarle atención a las zonas erógenas! Tanto hombres como mujeres, en su gran mayoría, buscan el orgasmo sólo a través de la penetración. De esta manera, desatienden otras zonas que al estimularse pueden generar placer y orgasmos, como es el clítoris o el perineo.

¡No planifican! Vamos, si justamente lo que los tiene presos de sus preocupaciones son las rutinas, planifiquen el momento en el que puedan dedicarse íntegramente al placer, a una cita, a un encuentro íntimo, a un juego.

No se masturban. El sexo en pareja y la masturbación son dos actividades diferentes, que pueden realizarse a la par, sin que genere ningún tipo de conflicto. Pueden hablar en la pareja y saber que la masturbación activa no implica una falta de deseo respecto de la pareja y del encuentro sexual.

Por último, deja de comparar. No necesitas compararte todo el tiempo con la vida sexual de tus amistades o parejas conocidas. Así estás estableciendo metas que nada tienen que ver contigo, con tus gustos o los de tu pareja. Céntrese en ustedes, sin observar tanto a aquellas otras personas.